Qué hacer o no en un evento swinger?

29.03.2022

Después de varios años asistiendo y organizando reuniones, fiestas y eventos swinger; hemos observado varias acciones o conductas, tanto buenas como erróneas en las que las parejas, chicas y chicos concurren y que al final de la velada afecta su ingreso a este estilo de vida y más aun el cumplimiento de sus fantasías.

Las reuniones swinger están hechas básicamente para el meet and greet, es decir; para conocer parejas y personas que con experiencia o sin ella son afines a lo que nosotros buscamos. Todos los que están en una reunión swinger buscan lo mismo, no se sientan como un bicho raro.

Ábranse y dence a conocer de la mejor manera, conversen, hagan amistad que en definitiva en el ambiente swinger somos amigos que compartimos fantasías. Si se van a una esquina y no hablan con nadie o no se le acercan a nadie, tengan por seguro que nada pasará y será una noche para ustedes aburrida. Las fantasías están al alcance de un "hola, somos......."

Las reuniones siempre tiene espacios para tener sexo, cuartos públicos, aéreas de descanso, cuartos oscuros, entre muchos otros, están allí para su disfrute úsenlos y permitan que otros los usen.

Si bien no deciden estar o compartir con una pareja, tu esposa o esposo están allí para ti, disfrútense y disfruten su sexualidad con total plenitud, sin culpa.

No creas que una reunión swinger es como una película porno, aun cuando el objetivo final es tener sexo compartido, todos tiene sus ritmos, pausas y tiempos, debes aceptarlos y no apresurar las cosas, tu esposa es la que marca el ritmo y el tiempo, guíate por ella. El swinger es un mundo de mujeres. Si estas con tu esposa nunca te comportes como un chico solo.

En muchos sitios y en varios países la palabra "jugar" es la palabra mágica, la palabra que abre las puertas a tus fantasías, si están conversando con una pareja, chica o chico y se sienten cómodos y seguros como para invitarlos a tener sexo, la pregunta a hacer es ¿Ustedes juegan? ¿Jugamos? ¿Cómo juegan? Y todos tienen la opción de decir NO y ese No es aceptado sin recriminación.

Cuando estén teniendo sexo o jugando con una pareja o bien quieran invitar a un chico solo o chica a participar la regla del "toque" es fundamental. La dama es la que invita con el toque bien sea a la pareja o a cualquiera que desee. Ojo, el caballero nunca es el que invita con el toque, es la dama. Puesto que la dama es quien decide.

Has un recorrido por el lugar es fundamental conocer el campo de "juego".

Mientras más alta es su expectativa mas lejana esta el cumplir sus fantasías, a una reunión swinger van todo tipo de parejas, gorditos, flacos, altos, bajos, jóvenes, viejos, adultos contemporáneos todos tiene derecho de estar allí y todos tiene algo que decir y que contar, tiene algo que dar y recibir. Es bien sabido que el estilo de vida swinger es para parejas y normalmente esas parejas son matrimonios que rondan las edades de 35 años en adelante, esto no quiere decir que no asistan parejas de menor edad, también asisten y comparten pero cerrarse por el tema edad es cerrar puertas al placer compartido y a experiencias inimaginables. Claro, cada pareja tiene sus gustos y afinidades; buscarlas, procúralas con educación, entendiendo la pluralidad y la empatía para con los asistentes es la mejor carta de presentación. 

No se excedan de tragos, las reuniones swinger no son espacios para discutir con la pareja (si no están seguros no asistan), pregunten siempre si se puede fumar no lo den por hecho, no hagan uso de cámaras fotográficas o videos sin autorización por parte de los anfitriones. Recuerden que los organizadores evalúan estas cosas, corren el riesgo de no ser invitados o aceptados nuevamente.

Siempre acudan a los anfitriones cualquier duda, ellos están allí para ayudarlos y guiarlos.

Lleguen a tiempo, relájense, conversen, hagan amigos, disfrútense como pareja, sean claros con los demás en cuanto a que buscan y como lo quieren, respeten siempre, tengan claras las reglas del juego y el cumplimiento de sus fantasías llegara más temprano que tarde! 

Por: Angel Arvelaez